Te aseguro que si las cosas hubieran salido bien los dos hubieramos sido adrenalina de la buena, de la que te hace sentir a mil por hora. Pero supongo, que después de haber sido una pieza que no podia faltar en mi vida veo que las cosas cambian. Que yo era una ilusa y tú el típico chico que sale de cacería sin ninguna intención más que tener a alguien con quién poder enredarte entre las sábanas y olvidarla cada mañana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario