domingo, 13 de junio de 2010


Y entonces corremos, corremos como locos y nos refugiamos frente a un portal, casi resbalándonos para protegernos del granizo. Nos quedamos así, al frío, bajo un balcón. Después empieza a nevar y nosotros sonreimos. Y, como el granizo, este recuerdo también se deshace

No hay comentarios:

Publicar un comentario